Presentación

El presente programa refleja la forma que desde el Partido de la Clase Trabajadora comprendemos la sociedad en la que vivimos, así como la visión de cambio que queremos impulsar.

En Costa Rica como en todos los países del mundo se vive y se sufre una sociedad capitalista, en la que un pequeño sector de la población encabezado por las personas y bancos dueños de las grandes empresas dominan al conjunto de la población y deciden sobre sus vidas.

En el capitalismo la mayoría de la riqueza se produce en las grandes empresas que se constituyen en fábricas, constructoras y grandes plantaciones, a cargo de las manos de decenas de miles de obreros y obreras, pero esa riqueza no es disfrutada por el conjunto de la sociedad, si no que va directo a las cuentas personales de quienes detentan las acciones de esas empresas.

La riqueza producida masivamente por la clase obrera, pero apropiada de manera individual por los dueños de las grandes empresas, genera una sociedad no solo profundamente desigual, si no que implica que un sector cada vez más grande de la población sufra una gran miseria. En un país como Costa Rica, el capitalismo genera que cientos de miles de personas no puedan hacer más de 2 comidas al día, no tengan un techo digno y mucho menos un empleo formal, ni servicios públicos de salud o educación.

Al servicio de esa apropiación injusta de la riqueza por parte del pequeño grupo de dueños de grandes empresas, están las instituciones del Estado, que van desde la presidencia de la República, los ministerios, las diputaciones, el poder judicial, la controlaría, y en general todas las leyes e instituciones que están al servicio de garantizar que la clase empresarial realice el saqueo de la riqueza que produce la clase obrera, garantizando la explotación y cuidando de que nadie se rebele contra ese orden inmoral.

En el PT luchamos por construir una alternativa política socialista y revolucionaria, porque creemos que esa realidad se puede cambiar, siempre y cuando la clase obrera, esa misma que produce la riqueza de las grandes empresas del país, pueda organizarse políticamente y plantearse como el sector que debe estar al frente de la sociedad, tomando por medio de una revolución social el poder político con una nueva forma de administrar e invertir la riqueza del país.

La clase obrera en el poder podrá transformar las instituciones que hoy garantizan el dominio y la explotación de esos grandes empresarios, en unas nuevas que permitan que la riqueza se invierta en beneficiar a la mayoría de la sociedad, a eso llamamos un estado socialista.

El presente programa político recoge la experiencia de la lucha del movimiento obrero y popular durante más de 200 años, pensamos que puede ser una guía para decenas de personas trabajadoras, desempleadas, jóvenes, migrantes, que ven la necesidad de cambiar la realidad que vivimos y sufrimos pero no saben por dónde empezar “ni cuál piedra poner primero”.