El 25 de noviembre se conmemora el día de la no violencia contra las mujeres. Este año, alrededor de veinte mujeres han sido asesinadas por violencia machista; muchas sufren cotidianamente expresiones de violencia como acoso callejero, acoso sexual en centros trabajo y estudio, abusos físicos y psicológicos por parte de sus parejas y todo esto hasta llegar a los femicidios.
El Informe del Estado de la Nación, publicado el 13 de noviembre del año en curso, determina que si las mujeres desempleadas en el país, tuviesen acceso al trabajo remunerado, los índices de pobreza que van en aumento, se disminuiría a la mitad, esto es una política de los gobiernos para mantener mano de obra barata a su disposición a merced de la desigualdad y la pobreza, violentando de esta manera a las mujeres, pero esto es un tema que no solo se resuelve generando empleos para las mujeres de la clase trabajadora, debido a que los quehaceres domésticos y el cuido de niños y adultos mayores queda relegado a las mujeres, por lo que imposibilita la reinserción laboral o las hace asumir doble jornadas manteniendo su empleo y el trabajo doméstico, como hacen muchas actualmente , el estado debe garantizar centros de cuido y comedores de calidad desde las diversas comunidades y centros de trabajo, financiados con los impuestos a las grandes empresas, para que las mujeres puedan integrarse con facilidad al mercado laboral.
Los partidos políticos que están en la Asamblea Legislativa y el gobierno buscan aprobar el plan fiscal. Si se aprueba, las condiciones de vida de la clase trabajadora se verán afectadas: aumentará la pobreza, el desempleo y habrá recortes en salud, educación y cuido, perjudicando principalmente a las mujeres de la clase trabajadora. Para aquellas mujeres que viven en situaciones de violencia, un mayor empobrecimiento dificultaría aún más salir de los ciclos de violencia, porque generaría una mayor dependencia económica con su agresor.
El gobierno de unidad nacional no brinda una salida a las mujeres pobres y trabajadoras
Mientras esto sucede, el Frente Amplio tiene a Patricia Mora como Ministra de la Condición de la Mujer en el gobierno, quien continúa prometiendo a las mujeres que desde su ministerio puede ayudarlas mientras les vende la idea de que con emprendedurismo tendrán su vida solucionada. El rol de Patricia Mora ha servido solo para desmovilizar, creando falsas ilusiones a las mujeres que tienen sus derechos amenazados con la aplicación del plan fiscal.
Este gobierno ha demostrado tener un rol traicionero ante las necesidades de las mujeres, y abiertamente ha dicho que temas relacionados con los derechos de las mujeres no son su prioridad, como ocurrió con el aborto terapéutico, cuya norma técnica sigue sin aprobarse. La prioridad del gobierno ha sido muy clara, aprobar el Plan Fiscal para pasar el cobro de la crisis a los sectores más empobrecidos, dentro de ellos las mujeres.
No puede haber ni una menos con el Plan Fiscal
Es necesario combatir las políticas que nos conducen a la pobreza, la precariedad, el desempleo y que nos condenan a la dependencia económica, porque estas nos colocan en una mayor vulnerabilidad para ser víctimas de relaciones de violencia. Es por esto que la lucha contra la violencia no puede darse de manera aislada de la lucha contra el plan fiscal y las políticas de recortes del gobierno.
Esta lucha no se ganará en alianza con los gobiernos de los ricos, por el contario la verdadera batalla se da en las calles junto a las valientes mujeres que han estado luchando contra el plan fiscal. Por eso necesitamos de la participación activa de las organizaciones políticas y sindicales que han estado en la lucha contra el Plan Fiscal para que este 25 de noviembre salgamos a las calles a manifestarnos.
¡Ni una menos! ¡Que la crisis la paguen los ricos para salvar la vida de las mujeres!
¡Contra el plan fiscal y la política de recortes! ¡Que el dinero de la deuda se invierta en trabajo, vivienda y servicios de atención para combatir la violencia!