Todos los años se celebra el 8 de marzo como “Día de la mujer”. Recibimos mensajes, saludos, flores o hasta chocolates. Se reproducen los estereotipos sobre ser mujer: delicadas, sensibles, cuidadoras, madres, y se nos celebra por cumplirlos.
Desde el Partido de los Trabajadores llamamos a recordar que la fecha nació gracias al movimiento internacional de mujeres socialistas del siglo XIX. Quienes votaron, por iniciativa de Clara Zetkin, conmemorar a las obreras luchadoras de 1857 y a las de 1908 (en la fábrica Cotton de Nueva York) quienes habían dado la vida exigiendo mejores condiciones de trabajo, derecho a una jornada de 10 horas, igual salario que los hombres y tiempo para lactancia.
El Día Internacional de la Mujer Trabajadora tiene por lo tanto un carácter de lucha de las socialistas internacionalistas. La mejor forma de conmemorar a estas obreras es combatiendo las condiciones de explotación y opresión que hasta la fecha se mantienen. El capitalismo ha sido incapaz de garantizar incluso las reivindicaciones más básicas como igualdad de salario, por las que estas valientes mujeres murieron hace más de cien años.
Nuestro deber es seguir llamando a las mujeres trabajadoras, migrantes, nicaragüenses a la organización y la lucha por la reivindicación.
El 8 de marzo es por lo tanto un día para celebrar a todas las mujeres luchadoras socialistas que seguimos construyendo el socialismo internacional y no descansaremos hasta conquistar una sociedad sin clases sociales ni opresión machista.