El Tribunal Contencioso Administrativo suspendió la multa de ¢2.157 millones que le impuso la SUTEL al ICE por supuestas prácticas monopolistas y anticompetitivas, tras la denuncia de la multinacional Movistar entre 2011 y 2012.
Este conflicto tiene sus raíces en la aprobación de los Tratados de Libre Comercio y sus leyes de implementación, que imponen un modelo de apertura económica que, bajo el discurso de la “libre competencia”, buscan desarmar las instituciones públicas. Dicha arremetida contra las instituciones estatales es parte de los objetivos de los TLC, especialmente el que se firmó con Estados Unidos en 2007.
Las reacciones posteriores al fallo no se han hecho esperar. Ni bien había trascendido el dictamen de la Sala el PAC salió a celebrar la “buena nueva”.
Antes de la suspensión de la multa, El l FIT-ICE y algunos diputados del Frente Amplio alzaron su voz de condena y amenazaron con ir a la calle para defender dicha institución. La diputada Patricia Mora hizo declaraciones para el diario La Prensa Libre, donde compara los hechos con la lucha contra el Combo del ICE, y amenazaba con marchas si la multa no se retira[1]. Sin embargo, legisladores como Jorge Arguedas luego bajaron el tono amenazante y dijeron que la nueva medida “le da un nuevo respiro al ICE”[2].
Para nosotros, si bien el fallo representa un revés mínimo para la transnacional de las telecomunicaciones, el panorama para el ICE sigue siendo igual de complicado porque la lógica privatizadora y entreguista permanece.
Aunque coincidimos en que la movilización es el método predilecto para luchar contra las medidas privatizadoras y de desarme del aparato estatal, nos preocupan los llamados del Frente Amplio. Las dirigencias sindicales del ICE y los parlamentarios de dicho partidos, presionados por coyunturas específicas, amenazan con movilizaciones, pero no hay un interés por movilizar a las bases del gremio y a las comunidades e ir a fondo en la pelea en las calles por recuperar el carácter público del ICE y de más instituciones privatizadas.
El Frente Amplio, a fin de cuentas, llama a tener confianza en la SUTEL y en la “institucionalidad costarricense”, gesto que el mismo PAC le aplaude al FA.
De parte del Partido de los Trabajadores nos parece que todo el asunto prueba la lógica del estado y desnuda el verdadero carácter de la SUTEL, que se plantea como “juez imparcial” pero termina resolviendo a favor de las grandes empresas transnacionales.
El pueblo no debe confiarse en más fallos de los Tribunales puesto que son parte de la mismo conjunto de instituciones como la Sala IV y la SUTEL que, a pesar de fallos puntuales, en el mediano y largo plazo siempre están al servicio de los empresarios y políticos de siempre.
Además, ya sin esta multa hoy el ICE está enfrentando una complicada situación financiera derivada de la apertura, además de ataques de la Alianza que quiere ampliarle el tope a la cogeneración privada y del gobierno que quiere ponerlo a construir carreteras a pesar de la situación de grave endeudamiento de la institución.
Nos parece este tipo de polémicas se van a seguir dando, y la única forma de garantizar una mejora en los servicios del ICE es acabar de una vez por todas con la privatización que supuso la llegada de Movistar, Claro y otras transnacionales.
Para lograr esto debemos romper con todos los Tratados de Libre Comercio y las leyes de la agenda de implementación, como la de Apertura en Telecomunicaciones, que desde su implementación en el país no han servido más que para entregar las instituciones públicas y los pocos recursos naturales que nos quedan al imperialismo, atentando contra la soberanía nacional.
Los resultados están a la vista: en más de siete años de TLC con Estados Unidos lo que creció en el país fue la desigualdad, la pobreza, el desempleo y los ataques a los derechos laborales.
Los seguros y las telecomunicaciones se han visto aún más debilitados y la amenaza permanente de demandas internacionales contra el país, por parte de empresas que alegan violaciones contra el “libre comercio”, están a la orden del día. Además la pérdida de recursos provenientes de las telecomunicaciones se han venido traduciendo en mayor endeudamiento del ICE, tarifazos al pueblo y ataques a sus mismos trabajadores por la vía de recortes a conquistas salariales y de tercerización en los puestos de trabajo.
A esto hay que sumarle que con los TLC aumentaron los privilegios a los inversionistas extranjeros (subsidios y exenciones fiscales), mientras que el campesinado sigue su ruina con la entrada masiva del agronegocio. Este mismo modelo neoliberal y explotador, que instauraron el PLN y el PUSC, es el que reivindica el gobierno del PAC.
En ese sentido es que proponemos luchar por la salida del país del TLC y la nacionalización de las telecomunicaciones sin indemnización a Claro y Movistar. Hacemos un llamado al Frente Amplio para que rompa con el gobierno y asuma una verdadera lucha por salvar el ICE de la quiebra y la privatización cada vez más inminentes con el TLC.
Esta es una lucha contra la SUTEL y contra todos los políticos que defienden la vigencia del TLC y de la apertura de las telecomunicaciones, verdaderos motores de la privatización y los ataques del ICE.
¡Fuera MOVISTAR y CLARO!
¡Para defender al ICE de verdad luchemos por la ruptura con el TLC y sus leyes de implementación!
Nacionalicemos todas las telecomunicaciones sin indemnización para las transnacionales