La marcha de ayer martes 16 de agosto en defensa de la Educación Superior Pública ante las amenazas de recortes por parte del gobierno de Rodrigo Cháves, fue no solamente multitudinaria, sino también victoriosa. O, al menos, parcialmente victoriosa.
Alrededor de 30 mil personas marcharon hacia Casa Presidencial en rechazo de los fuertes recortes que el gobierno pretendía golpear a las U Públicas.
Participaron estudiantes, personas docentes y del sector administrativo de todas las U Públicas, así como delegaciones de algunos sindicatos públicos (SEC, Rerum Novarum, CGT, etc.).
El resultado de la marcha fue que el gobierno abandonara sus pretensiones de recorte y que llegara al acuerdo con las rectorías de mantener el mismo presupuesto que fue negociado en el 2021. Esta es una victoria que solo puede ser atribuida a la gran capacidad de movilización de las comunidades universitarias.
Pero, esta victoria, que debe ser celebrada, es una victoria parcial. El día de hoy se negociará si el gobierno reconocerá o no la inflación acumulada hasta el momento en el presupuesto. Y, además, la negociación sigue siendo anual, no quinquenal, lo cual aún deja vulnerables a las U Públicas, que tendrán que negociar el próximo año de nuevo su presupuesto, con muchas probabilidades de nuevos intentos de recortes.
Es decir, el FEES no se ha recuperado, porque, tal y como se define en la constitución política, este consiste en negociaciones quinquenales a la alza, lo cual permite a las U Públicas planificar el uso de sus presupuestos sin estar a merced año tras año a los intereses particular del gobierno de turno.
Así, a pesar de que ayer se obtuvo una victoria, hay que mantener las antenas de alerta activadas, por las posibles maniobras con las que este gobierno pueda salir… Solo el día de ayer veíamos cómo salía el presidente a anunciar la venta del BCR, BICSA y la mitad del INS; no podemos descartar jugarretas similares con las U Públicas o la Educación en general. De igual manera, no podemos confiar «a ciegas» en las rectorías, que ya en el pasado han entregado la lucha por las U Públicas.
Y, por otro lado, el gobierno, con la negociación de hoy, pretende desmovilizar a las U Públicas, ya que hoy demostraron que no solo somos capaces de defendernos, sino de también de luchar exitosamente por otras consignas, lo cual pone al gobierno a temblar.
Es por esto que, desde el Partido de los Trabajadores, hacemos un llamado a que la lucha no se detenga. Es necesario que se convoquen lo más rápido posible a asambleas abiertas en que estudiantes, personas docentes y del sector administrativo de las U Públicas en donde se discuta sobre los resultados de la marcha del pasado martes y sobre las acciones que debemos realizar para recuperar, de una vez por todas, el FEES, garantizando que se reconozca la inflación en el presupuesto y que las nuevas negociaciones sean obligadamente quinquenales.