Más de 500 Trabajadores agrícolas de la empresa de Palma Africana, PALCASA, se encuentran en huelga desde el pasado 13 de Septiembre. El objetivo de este amplio movimiento es exigir el cumplimiento de una serie de reivindicaciones mínimas, establecidas en la legislación laboral nicaragüense, que la patronal incumple sistemáticamente.
Algunos de los reclamos de los trabajadores, tal y como son descritas en su comunicado son:
“los maltratos y agresiones sicológicas por los gerentes agrícolas y supervisores de área”, que a pesar de que se les contrata por una jornada diaria de ocho horas “los gerentes agrícolas [les] obligan a trabajar por avance que hagamos en el campo”, “Que las liquidaciones son retrasadas hasta por más de un año” , “que los salarios son bajos y en muchos casos, inferiores al salario mínimo”, entre otros.
Es claro como las reivindicaciones de estos trabajadores en huelga corresponden al cumplimiento de derechos laborales mínimos. Entre las reivindicaciones que buscan lograr se encuentran la definición de una jornada laboral de ocho horas, el despido de los supervisores que maltratan a los trabajadores y el cese del abuso psicológico por parte de la patronal, pago de un mejor seguro, que se la patronal les garantice todas sus herramientas de trabajo necesarias, que haya igual pago por igual función, etc.
Desde el Partido de los Trabajadores nos solidarizamos con este valeroso y justo movimiento de huelga de los trabajadores de PALCASA y ponemos nuestro partido y militancia al servicio de su victoria. Es un hecho que el empresariado ligado al agronegocio de la palma africana opera como uno solo en toda centroamérica y tiene múltiples lazos que lo unifican y hermanan sus intereses. Es por ello que esas mismas arbitrariedades contra las que hoy estos trabajadores nicaragüenses se alzan en huelga, también las padecen cientos de trabajadores ticos y nicas que trabajan la palma africana en nuestro país.
Es por está razón que como partido elegimos ofrecer toda nuestra solidaridad con esta huelga de trabajadores nicaragüenses, en lugar de dejarnos distraer por la exaltación nacionalista que el gobierno de Chinchilla y el de Ortega vienen agitando en relación a la legítima propiedad de la provincia de Guanacaste y más recientemente con el tema del dragado de Isla Portillos. No importa quien tenga la razón, al final de cualquier lado de la frontera los trabajadores seremos tan explotados y violentados en nuestros derechos por la patronal, como engañados y abandonados por los gobiernos que la representan.
Hacemos también un llamado a todas las centrales sindicales del país a pronunciarse en apoyo a la huelga de los trabajadores de PALCASA y a ponerse a su disposición toda la solidaridad.