Si bien el abstencionismo este pasado 6 de abril fue el más alto de la historia es innegable que hay una gran ilusión o expectativa hacia el gobierno de Luis Guillermo Solís (LGS), reflejada en la votación de casi 1.300.000 personas.
Sin embargo, más allá de las ilusiones que despierta esta elección, es central que los trabajadores entendamos que el gobierno de LGS no va a resolver ninguno de los principales problemas que hoy enfrentamos.
Las expectativas e ilusiones puestas en este gobierno no tienen ninguna base, pues además de representar los intereses de los grandes empresarios, este es un gobierno que desde ya ha anunciado que va a continuar con algunos de los proyecto más antipopulares del gobierno de Chinchilla. Tal es el caso del Plan Fiscal basado en el IVA, y la Ley de Empleo Público, con la que pretenden cobrarle la crisis a la clase trabajadora, mientras los privilegios de las empresas siguen intactos.
A pesar de las frases de que “nada será como antes” y de que “es el fin de la vieja política” lo cierto es que el gobierno de LGS es un gobierno de continuidad neoliberal, que no nos ofrece ningún cambio de fondo. En solo unos días LGS ya dejó claro por donde va su gobierno, afirmando tener acuerdo en la cogeneración privada de electricidad para “abaratar los costos”, en los ataques a los trabajadores estatales, además de la agenda mencionada
Este no ha dado una respuesta a los despidos en Intel y en otras empresas como PIPASA y Bank of America, ni ha tenido una postura digna con el ilegítimo e ilegal pago a la transnacional OAS. Para colmos, recientemente anunció que “lo mejor del PUSC y otros partidos” van a ser parte de su gabinete.
¿Depositar la confianza en el gobierno o salir a luchar este primero de mayo?
Este gobierno ya ha dado señales claras: este va a ser un gobierno de continuidad, de ataques a los trabajadores, y no un gobierno que defienda nuestros intereses. Por esta razón depositar la confianza en este nuevo gobierno de los grandes empresarios, o darle una “tregua” es algo muy peligroso.
Los trabajadores debemos seguir levantando nuestras banderas de lucha de forma independiente. Nuestras luchas siguen abiertas, nuestros recursos siguen depredados, nuestros derechos laborales pisoteados, los despidos siguen ocurriendo impunemente, y la tierra sigue en pocas manos.
LGS no tiene respuesta a ninguno de estos problemas, y como si fuera poco, la agenda que LGS ha heredado del actual gobierno de Chinchilla sigue avanzando, pretendiendo que seamos los trabajadores quienes paguemos la crisis.
Por esto nos parece lamentable la actitud de algunas dirigencias sindicales y organizaciones políticas como el FA que hoy aplauden y felicitan al gobierno de LGS, o están llamando a “darle tregua al gobierno”.
Desde el PT creemos que hoy es más importante que nunca reivindicar un 1ro de Mayo de lucha, independiente del gobierno, adonde llevemos nuestras propias banderas, adonde salgamos a luchar por una agenda que rescate a fondo nuestras necesidades como trabajadores.
Necesitamos que el primero de mayo sea una fecha combativa, adonde le demos continuidad a las luchas que ya venimos dando: es preciso salir a luchar por la CCSS, por nuestros derechos laborales, por la tierra, etc. Debemos salir a exigir en las calles, que es a fin de cuentas la única forma en que la clase trabajadora ha ganado algo.
Queremos invitar a nuestros amigos, simpatizantes y a los trabajadores en general a que se unan con nosotros este primero de mayo, celebrando y luchando. Les invitamos a nuestra columna en la manifestación, les invitamos a que vengan con sus propias banderas y sus propias demandas. Finalmente, les invitamos a nuestro acto político después de la marcha, adonde discutiremos sobre la verdadera forma de resolver nuestros problemas, mediante la lucha y la organización independiente de la clase trabajadora.
¡Ninguna tregua con el gobierno, ninguna confianza en que nos vaya a resolver los problemas! ¡Lo que debemos hacer para es luchar y luchar!
¡Este primero de mayo a las calles a seguir luchando por una agenda de la clase trabajadora!